Curry de pollo

Este plato es el que hago cuando de verdad quiero impresionar a alguien. Y siempre lo consigo! Es realmente diferente, exótico y muy rico. Lo suelo acompañar con arroz blanco salteado con pasas y almendras fritas aparte, pero también es muy original servirlo con tallarines. El tipo y la calidad del curry es la clave: el mejor para esta receta es el curry japonés que se vende en forma de tabletas (semejante a una tableta de chocolate) en las tiendas de comida japonesa y en algún Supermercado Internacional de El Corte Inglés, pero en su defecto, también está muy bueno el curry en polvo de la marca Sharwood's. Yo lo encontré en Delicatessen Internacional de El Corte Inglés.

6 pechugas de pollo troceadas o solomillo de ternera cortado en cuadrados
500ml de nata líquida
1 cebolla picada
Setas troceadas
Sal y pimienta
Aceite de oliva virgen extra
Un chorro de cognac
Curry

Sofreír en aceite de oliva las setas a fuego fuerte. Salpimentar y apartar. En la misma sartén,  sofreír a fuego medio-bajo la cebolla picada y cuando esté dorada, añadir la carne troceada. Sofreír a fuego alto sólo hasta dorar la carne por fuera. Salpimentar y verter un chorro de cognac. Dejar evaporar el alcohol. Añadir el curry. La cantidad de curry es el que se quiera, a mí me gusta fuertecito y suelo ser generosa con el curry, pero lo mejor es ir probando hasta conseguir la intensidad deseada. Si usas curry en pastilla, usa una sólo porque suele ser más fuerte que el curry en polvo.

Añadir las setas y la nata líquida, bajar el fuego y dejar cocer hasta que se espese. Probar y volver a salpimentar si fuera necesario.

Yo esta vez he cambiado las setas por un puñado de moixernons secos que dejé previamente en remojo durante 1 hora.

Es una receta muy sencilla y está buenísima! También la podéis ver en el blog más completo www.prettypretty.susiko.com