Hace unos meses mi reumatólogo me ha recomendado una dieta sin gluten. En realidad, es muy difícil no tomar nada de gluten. Cuando hablamos de una dieta sin gluten, nos referimos a una dieta baja en gluten ya que hay cantidades mínimas de gluten en muuuuuchos productos, pero yo debo de seguir una dieta con cero gluten. No lo consigo, pero intento reducir el consumo de productos bajos en gluten.
Me encanta cocinar, me encanta comer y me encanta probar nuevos sabores. Por suerte, tengo una familia que comparte esta pasión y no teme probar comidas no tan tradicionales.
Mi infancia discurrió en varios países y continentes por lo que estoy acostumbrada a sabores y presentaciones algo "distintas" a lo equivalente a mi generación en España.
El tener que renunciar a los caprichos de toda una vida amando el gluten sin saberlo, me ha hecho pedir, buscar y experimentar nuevas recetas capaces de satisfacer la ansiedad que provoca el cambiar de hábitos.
En mi lucha diaria en la búsqueda del equilibrio entre el tiempo para mi familia, mi trabajo y seguir siendo persona, no tengo mucho tiempo para cocinar y menos para buscar ingredientes que no están en los supermercados de mi entorno. Por eso, intento que mis recetas sean sencillas, fáciles y "aptas" para celíacos.
Espero así ayudar a aquellas personas que, como yo, están buscando alternativas deliciosas a los platos que han estado en nuestras casas toda la vida.
